REDUCCIÓN DE LAS DESIGUALDADES

¿EN QUÉ CONSISTE?

La desigualdad no se trata solo de la riqueza, el patrimonio neto, o de los ingresos, el sueldo bruto. También puede abarcar la expectativa de vida, la facilidad que tiene las personas para acceder a los servicios de salud, la educación de calidad o los servicios públicos. Hay desigualdades entre los géneros y entre los grupos sociales.

Para la ONU la desigualdad social se produce cuando una persona recibe un trato diferente como consecuencia de su posición social, su situación económica, la religión que profesa, su género, la cultura de la que proviene o sus preferencias sexuales, entre otros aspectos. Y la desigualdad de género se produce cuando una persona no tiene acceso a las mismas oportunidades que una persona de otro sexo.

COLOMBIA

Colombia es un país con altas desigualdades tanto territorial, así como entre diferentes grupos de población. Esta condición trae consecuencias sociales como un flujo migratorio inadecuado; consecuencias que retrasa el crecimiento económico y político, como la polarización de la población, reclamos y quejas que se manifiestan en protestas sociales. Por tanto, en cumplimiento de este ODS se materializa la apuesta política real de estos objetivos. El progreso en la reducción de las desigualdades se lleva a cabo desde tres frentes principalmente: crecimiento, tributos y subvenciones.

Es importante mencionar que la reducción de las desigualdades puede generar un efecto multiplicador y catalizador en el cumplimiento de otros objetivos. Por ejemplo, cerrar las brechas de género en el mercado laboral incentiva mecanismos de trabajos decentes, el empoderamiento de la mujer y reducción de pobreza, contribuyendo al progreso en el cumplimiento de diferentes objetivos simultáneamente.

ESTADÍSTICAS

En Colombia la población mas adinerada recibe como proporción del ingreso 3,4 veces más que el 40% más pobre

Fuente: Mejía (2017)

En la estadística se puede evidenciar que Colombia ha venido reduciendo su desigualdad en ingreso, el coeficiente de Gini es 0.572 en 2002 a 0.508 en 2017; sin embargo, se considera elevado. La situación es más desigual con el Gini de tierras, pues este coeficiente para el 2014, según calcula la Unidad de Planificación Rural agropecuaria, se ubicó en 0,733, presentando mayor acentuación en departamentos como Nariño, Cauca, Huila, Vichada y Amazonas.

Los deciles de ingreso se encuentran una desigualdad alta. El índice de Palma de Colombia muestra que mientras que en 2010 el 10% de la población más rica obtuvo 4,6 veces el ingreso del 40% más pobre, en 2017 esta relación pasó a ser del 3,4, lo que muestra que sí hay una evidencia de la disminución en la desigualdad en los últimos años. En las zonas urbanas pasó de 4,0 a 3,0, y en las áreas rurales y centros poblados se ha mantenido casi constante pasando de 2,7 a 2,5. Según el índice de Palma y el Coeficiente de Gini, las ciudades más desiguales de Colombia son: Quibdó, Riohacha y Bogotá; por el contrario, las ciudades con mayor igualdad es Pereira, Bucaramanga e Ibagué.

Las ciudades que más han realizado avances en equidad de ingresos en los últimos años son Armenia, Medellín y Cali.

Ante la profunda transformación de movilidad humana, el país se ha convertido progresivamente en un lugar de origen, tránsito y destino de migración internacional, donde llama especialmente la atención el incremento de los migrantes que ingresan al territorio nacional en situación irregular.

Primordialmente se identifica que se debe fortalecer el modelo de gestión y gobernanza de la migración, teniendo en cuenta de que el país cuente con leyes, decretos, resoluciones y lineamientos de política pública que faciliten la migración y la movilidad ordenadas, seguras, regulares y responsables de las personas.

En el grafico se muestra las nacionalidades de migrantes que están en situación de irregularidad en el 2010-2016. Ciudades como Haití, Cuba, India, entre otras.

Fuente: Organización Internacional para las migraciones, 2017

La ONU advierte que la desigualdad en el mundo sigue en aumento y genera una amenaza al desarrollo social, frena el crecimiento económico y puede provocar mas inestabilidad política. Se nombra que en América Latina y el Caribe sigue siendo muy alta la desigualdad a pesar de la disminución que ha tenido.

En definitiva, la desigualdad de ingresos es un problema general que requiere soluciones globales. Estos incluyen la mejora de la regulación, el control de los mercados, las instituciones financieras, el fomento de la asistencia para el desarrollo y la inversión extranjera directa para las regiones que más lo necesitan. Otro factor clave para cerrar esta brecha es facilitar la migración y la movilidad segura de las personas.

METAS

10.1 Reducir las desigualdades de ingresos.

10.6 Garantizar la representación de los países en desarrollo en las instituciones financieras.

10.2 Promover la inclusión social, económica y política universales.

10.7 Políticas de migración compasivas y responsables.

10.3 Garantizar la igualdad de oportunidades y poner en fin a la discriminación.

10.A Trato especial y diferenciado para los países en desarrollo.

10.4 Adoptar políticas fiscales y sociales que promueven la igualdad.

10.B Reducir los costos de transacción de las remesas de migrantes.

10.5 Mejorar la regulación de los mercados e instituciones financieras mundiales.

10.C Fomentar la asistencia oficial para el desarrollo y las corrientes financieras.

RELACIÓN DEL ODS CON LA FAMILIA

El espacio de las familias y la formación en casa es perfecto para ayudar a que las nuevas generaciones sean inspiradas para reducir las desigualdades, ya que es en los hogares donde se crean las desigualdades en el momento que sucede que el padre es el que manda, la mujer y el niño son los que callan; esto tiene que cambiar porque los derechos de la infancia universalmente son prevalentes, pero desde la autoridades, las escuelas y las familias no se es capaces de asumir y entender la importancia de esto.

En la infancia es donde se necesita el espacio desde la educación y la familia para reconocernos y aceptarnos el uno al otro, ya que desde las emociones que nos enseñan en nuestros hogares podemos cambiar el lenguaje para tener mas empatía con el otro y ayudar a disminuir esta desigualdad.

Como metas que tenemos para cumplir en la Agenda 2030 encontramos:

Potenciar y promover la inclusión social, económica y política de todas las personas, independientemente de su edad, sexo, discapacidad, raza, etnia, origen, religión o situación económica u otra condición.

Garantizar la igualdad de oportunidades y reducir la desigualdad de resultado, incluso eliminando las leyes, políticas y prácticas discriminiatorias y promoviendo legislaciones, políticas y medidas adecuadas a ese respecto.